FUEGOS
TEXTO: MARGUERITE YOURCENAR
DRAMATURGIA: MARC ROSICH
DIRECCIÓN: JOSEP MARIA POU
INTÉRPRETES: CARMEN MACHI, CAYETANA GUILLÉN CUERVO, NATHALIE POZA y ANA TORRENT
DURACIÓN: 90min
PRODUCCIÓN: TEATRE ROMEA i FESTIVAL INTERNACIONAL DE TEATRO CLÁSICO DE MÉRIDA
TEATRE GREC (GREC 2013)
Era el estreno en Barcelona, una plaza difícil y a pesar de las buenas críticas recibidas en el Festival de Mérida el público barcelonés es más complicado de convencer que otros. Aunque en el Anfiteatro estuviera bastante lleno de amigos, familiares y seguidores. En medio de la naturaleza, se apagan las luces, fundimos a negro y comienza el espectáculo que este año cierra el Grec y las agendas teatrales de muchos.
Carmen Machi es Marguerite Yourcenar, la narradora que da paso a los monólogos de las otras tres actrices. No es su mejor papel. Esta temporada hemos tenido saturación de ella (Juicio a una zorra, Dispara/Agafa el tresor/Repeteix y Fuegos), y quizás esta última sea la vez en que nos la hemos creído menos, pese que a ella no sea la protagonista, simplemente reparta juego y ponga un poco de tranquilidad entre tanta voz trágica.
El primer monólogo lo protagoniza María Magdalena (Cayetana Guillén Cuervo) con demasiada pose sobre el escenario. Nada natural ni en presencia, ni en cuerpo ni en voz. Como algunos apuntaban una Maria Magdalena rubia, demasiado terrenal y que se olvida del plano espiritual para sacar todas sus vísceras en escena. No hay credibilidad, Cayetana pasa por el personaje sin creérselo, es María Magdalena como puede ser otra mujer. Faltan rasgos, matices tanto en presencia como vocales. No convence y sólo deseas que pase rápido.
Le toca el turno a Clitemnestra (Nathalie Poza), el gran monòlogo de la noche. Sorpresa para algunos, esperada interpretación para otros. Es sin duda la mejor que pisa el escenario del Grec sin miedos. Natural, impetuosa, intimista, llena de matices en gestos, voz y movimientos. Su monólogo es igual de desgarrador que los otros tres, pero sus ojos están llenos de paz, de una tranquilidad que inunda toda su interpretación. Brillante, incisiva, en definitiva enamora.
Y finaliza una peculiar Safo (Ana Torrent) equilibrista, pero que en la puesta en escena le sobra movimientos y le falta alma. Si el monólogo de María Magdalena es demasiado visceral, este es demasiado introspectivo, des de la fila 4 ya se hace lejano, no me puedo imaginar cómo lo sienten los espectadores que moran más arriba. Safo se hace pequeña en un teatro demasiado grande para un interpretación excesivamente intimista.
El espectáculo sólo tiene un par de fallos: la interpretación de dos de sus actrices (Cayetana Guillén Cuervo y Ana Torrent) y la iluminación de la primera hora. Obviamente dependerá desde donde veas el montaje, pero como siempre se tiene que pensar en todas las opciones. Miguel Ángel Camacho juega demasiado con las sombras (desde la fila 4 centrada) en un espectáculo donde ver la expresividad de las actrices es una pieza fundamental. Por contra el monólogo de Safo está perfectamente iluminado. A pesar de ello, la puesta en escena conservando el espíritu del Teatro Grec es acertadísima, estilo japonés, responde al juego que establecen las actrices.
Sin duda lo mejor de la obra es el texto. Algunos echen de menos algunos de los monólogos y personajes que completan el libro original de Marguerite Yourcenar, pero los elegidos están sabiamente bien tramados en un dramatúrgia perfecta y precisa (nada fácil) de Marc Rosich. A pesar de la verborrea de alguno de ellos, el espectáculo tiene un ritmo que funciona. Sólo voces y algún momento musical concreto (Ne me quitte pas de Jacques Brel) completan un espectáculo que cierra un Grec 2013 que mejora notablemente el del año pasado y que deja buen sabor de boca en general y ganas de saber qué nos espera en el 2014.
Carmen Machi com si no hi fos.
ResponderEliminarEscenografia de nou ric i equivocada : els jardins japonesos son petits per definició. Pou que actiu, i fent de secundari, perque primer actor no ho ha està mai
En Mérida ni éxito ni publico. I en Barcelona papanatismo porque Pou es un director malo!
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