TENNESSEE (w)
DIRECTOR: FRANCESC CERRO
DRAMATURGIA y ACTOR: MARTÍ PERAFERRER i VAYREDA
PRODUCCIÓN: TEATRE BLAU DE GIRONA y TEATRE TANTARANTANA
TEATRE GAUDI
Dedicarse al teatro en los tiempos que corren ya es todo un riesgo, pero si además eres valiente y te tienes que enfrentar al todopoderoso Festival Grec en pleno mes de julio, la hazaña ya se escribe en mayúsculas. Después de tres semanas de auténtica maratón teatral, era necesario salirse del circuito e ir a explorar otras naturalezas.
Martí Peraferrer, el héroe de la aventura nos explica la vida y milagros de Tennessee Williams en un monólogo de hora y media donde se combina palabra en directo con grabaciones. En primera persona, Tennessee habla, si desde el principio ocurre lo que pocas veces tenemos la suerte de encontrar, el actor desaparece y entre la buena caracterización y el buen savoire faire de Martí Peraferrer, la historia entra y el viaje comienza.
Escenográficamente muy simple, un salón con una chaise longue donde la terapia de confesiones alcanza su máximo esplendor. La sorpresa nos espera en la entrada a la sala donde nos inunda un ambiente cargado de humo y oscuro. Pese a ello, pronto salimos de la oscuridad y las palabras de Tennesse Williams nos invitan a pasar a una vida, eso sí, no menos tenebrosa y atormentada que la sala.
La cercanía entre actor y público es uno de los puntos más a favor del montaje, esa sensación de estar en un lugar donde las confesiones son íntimas. La entrega de Martí Peraferrer es máxima y la atención del público es de no poder despegar la atención del escenario.
Lástima que no sea la mejor época del año para lanzar una propuesta como esta. Lástima ver la platea tan vacía, pero parafraseando Un tranvía llamado deseo: "esto huele a éxito eterno", aunque tendrá que ser en otro lugar y en otras fechas.
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