CRONOLOGIA DE LAS BESTIAS
autoría y dirección LAUTARO PEROTTI
intérpretes PILAR CASTRO, PATRICK CRIADO, ÁLVARO LAVIN, CARMEN MACHI, SANTI MARÍN
duración 1h 15min
producción TEATRE LLIURE, OCTUBRE PRODUCCIONES y TEATRO ESPAÑOL
LLIURE GRÀCIA
Nos autoengañamos todos los días y nuestras mentiras no sólo nos afectan a nosotros mismos sino a todo aquel que nos rodea. Pero ya dicen que las mentiras tienen las patas muy cortas, o aquel refrán de que se atrapa antes a un mentiroso que a un cojo.
Sea como fuera esta obra va de mentiras, y la primera sería hacer creer que si somos espectadores vírgenes, de aquellos que el relato audiovisual ni les ha tocado podemos entrar en el juego que propone la obra. Para los que llevamos más frames y líneas de texto a nuestras espaldas que minutos respirados, vemos el truco antes de lo que nos gustaría.
Cronología de las bestias se encuentra a medio camino entre el culebrón/telenovela latinoamericana y las películas de sobremesa de Antena 3. Una especie de vida gritada y callada que deja al espectador medio descolocado porque aunque el final es de lo más previsible, la dramaturgia ha optado por "deconstruir la pieza" y ofrecernos la información en píldoras en un continuo ir y venir de flashbacks y flashfowards. La manera de contar la historia es, sin lugar a dudas, lo más interesante a la pieza. Aunque todo sea de paso, nada nuevo bajo el sol.
La puesta en escena con la escenografía de Mónica Borromello (aapee) y la iluminación de Carmen Martínez (aai) impresiona, parece como encajonado dentro de los límites del escenario a la italiana del Lliure de Gràcia pero esa sensación tan claustrofobia ayuda a "respirar" de otra manera el montaje. Es como si los protagonistas, que ya viven al borde del abismo, estuvieran atrapados en su propia jaula, aquella que ellos mismos se han construido.
Y aunque media platea esté buscando la mejor interpretación de Carmen Machi, se irán a casa con las manos vacías porque sin duda ésta no es su función, la dirección ha optado por no contener su interpretación que se desborda tanto que incluso llego a desear que se acaben sus réplicas. Por el contrario, nos podemos sorprender con la magnífica, cuidada y como escondida en un segundo plano, Celia, una descomunal Pilar Castro, que apenas se deja ver por la cartelera barcelonesa, y que para muchos será todo un descubrimiento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario