El encuentro de Descartes con Pascal joven, uno de los títulos mejor recibidos de la temporada 2008/2009, vuelve a representarse en Madrid (teatro Infanta Isabel) a partir del día 12.

"Es la consecuencia del gran éxito que tuvimos en el teatro Español, donde no pudimos programar más tiempo nuestra estancia, ya que los teatros públicos tienen cerrada su programación con mucho tiempo, pero mucha gente se quedó en la calle sin poder verlo", señala el director y actor Josep Maria Flotats, quien no menciona que el índice de ocupación que tuvieron alcanzó el 100%.

"Cuando se tiene el privilegio y la fortuna de que el público quiera vernos, nos debemos a él, finalmente es para quien trabajamos", apunta. El hecho es que este montaje, programado en origen en un teatro público, donde se estrenó el pasado mes de enero, ha sido rescatado en la misma ciudad por el teatro privado, algo realmente infrecuente y que la profesión reclama. No sólo con coproducciones o producciones privadas, sino también con los espectáculos que emanan de los presupuestos del erario público y que muchas veces hay que despedir para siempre cuando aún existen espectadores con ganas de verlo y posibilidades de explotación.

Para Flotats este espectáculo supone su segunda incursión en un texto de Jean-Claude Brisville (1922), un dramaturgo francés, reconocido como editor y cuyo teatro siempre tiene como base un fondo dramático ocupado por personajes de la historia, la literatura y el pensamiento. En los dos montajes que Flotats ha producido, dirigido y protagonizado de este autor, el argumento partía de encuentros y confrontaciones de los que históricamente no se sabía nada, aunque se produjeron.

Primero fueron Talleyrand y Fouché en La cena. Allí se desgranaba la relación del "vicio apoyado en el brazo del crimen". Ahora son Descartes y Pascal, los dos filósofos más importantes de su siglo. Se sabe que sólo estuvieron juntos una vez, pero nunca trascendió nada de aquel encuentro porque ambos guardaron un misterioso silencio que tres siglos después ha tratado de desvelar Brisville.

"Entre ambas obras el paralelismo es grande, se parte de un hecho real, que Brisville imagina y recrea maravillosamente", señala el actor quien aclara otros aspectos de estas obras. "En La cena hay un diálogo en primer grado en el que se trata del intercambio de cromos entre dos políticos para mantenerse en el poder. Un juego divertido, ácido, feroz, contundente y muy contemporáneo; mientras que en El encuentro..., aunque también hablan de política, Descartes y Pascal no quieren el poder, son dos intelectuales preocupados por su siglo y lo que pasaba en torno a la ética, la moral, la cultura, la Iglesia, los poderes, la monarquía, la reforma y contrarreforma. Es un texto austero, con un alto nivel de lenguaje, al tiempo que sencillo y entretenido; un diálogo que hace que la gente se identifique en diferentes momentos con uno y con otro; hay muchas posibles lecturas y además no está exento de humor, de hecho, las réplicas que hay entre ellos están plagadas de ironías e incluso socarronerías", comenta Flotats, quien tuvo como partenaire en La cena a Carmelo Gómez y ahora a Albert Triola. "Hace un Pascal magnífico y es un compañero excepcional", afirma.

El título de la obra provocó reticencias entre ciertos espectadores que viven el teatro como una fuente de diversión superficial. "Puede asustar a algunos espectadores. De hecho, yo esperaba que el montaje sería paladeado por un público minoritario, algo así como pasa con la música de cámara y la música sinfónica. Fui el primer sorprendido, no esperaba el éxito extraordinario que ha tenido; la gente que piensa que no va a entenderlo se equivoca".

Flotats no oculta que el interés suscitado le encanta. "En momentos de horas bajas uno tiende a pensar que la vulgaridad se está instalando por muchos ámbitos, que la tontería es aplaudida y está en su cima más alta, que el público se conforma con la baja calidad, pero de repente ver cómo los espectadores reaccionan así ante un texto inteligente de alto nivel es realmente satisfactorio", y añade: "Además hemos contado con un traductor que ha mantenido ese lenguaje culto, al tiempo que lo ha hecho magistralmente accesible a todos". Flotats se muestra encantado de que guste, interesa y cautive un teatro sin palabras soeces, sin destapes, ni músicas bailables.

A lo largo de su larga trayectoria Flotats ha trabajado para grandes teatros europeos y llegó a ser primer actor de la Comédie-Française en París. Pero tras su vuelta a España ha tratado de dar a conocer, tanto en el Teatro Poliorama como en el Teatro Nacional de Cataluña, que fundó, títulos poco o nada convencionales. Tras instalarse en Madrid la década pasada y montar aquí su propia productora ha seguido con la misma tónica y se ha arriesgado con obras difíciles, como París 1940 o estos dos textos de Brisville. Incluso se puede decir que el riesgo también existió con Arte, de Yasmina Reza, de la que no se sabía nada en España y que Flotats convirtió en uno de los acontecimientos teatrales más importantes de las últimas décadas.

"Dentro de mis planteamientos siempre está servir los textos que me entusiasman y me enamoran y que yo mismo querría ver encima de un escenario. Pongo en pie obras que considero de gran valor y no me pregunto si van a gustar o no. Por encima de eso está el placer y la libertad de comunicar los textos que me conmueven". El director añade que no quiere prescindir del placer de interpretarlos y comprobar si gustan o no: "Pero no hay intención de buscar originalidad ni acercarme a un teatro minoritario; únicamente pongo por delante que me gusten".

Después de convivir tanto tiempo dentro del pellejo de Descartes es inevitable preguntar cómo se lleva con él. "Si estuviera en el diván de mi psicoanalista, le confesaría que años atrás tenía algo de pascaliano. Me atraía esa actitud de que todo es blanco o negro, pero los años, además de arrugas, dan templanza y ahora soy más cartesiano, pero estoy contento porque el acercamiento es habiendo sido antes pascaliano... Todos hemos sido adolescentes".

El montaje es posible que permanezca algunos meses en cartel y que haya una nueva gira con él en 2010. En el horizonte Flotats tiene proyectos que no hay manera que comente. Lo que sí acaricia es la idea de montar la versión castellana de su espectáculo Stalin, basado en una novela del francés Marc Dugain. "Pero aún tiene que pasar un tiempo para olvidar la memoria y la mecanización en catalán para abordarlo en castellano".

Fuente: Rosana Torres en www.elpais.com

Más de dos mil personas han asistido en Mataró (Barcelona) a los espectáculos y actividades de libre acceso programados en el Festival Shakespeare.

La séptima edición del festival se ha clausurado con una revisión del Sueño de una noche de verano (en attendant le songe), firmada por Irina Brook, hija del emblemático dramaturgo Peter Brook, según ha informado la organización del evento.

El festival se ha desarrollado entre el 31 de julio al 9 de agosto con una programación inspirada en la figura del dramaturgo inglés y su obra.

El concierto de la Big Band Jazz Maresme y la lectura dramatizada a cargo de Mario Gas de «La caza del hombre» de Albert Balasch, junto a una instalación de Juanpere han configurado el cartel de producciones propias del festival.

Fuente: www.lavanguardia.es



Una vez finalizado el Festival Grec el pasado domingo, me voy a permitir la licencia de hacer balance de este año de intenso teatro. Una servidora, lleva a sus espaldas casi sesenta obras, la mayoría de la escena catalana. Hace once meses cuando se presentó la temporada que acabamos de concluir, en ese espectáculo que se conoce con el nombre de Barcelona aixeca el teló, la temporada teatral 08/09 pretendía superar a la del 07/08. Hoy podemos reconocer que no se ha conseguido. Puede ser que fuera demasiado grande el objetivo para alcanzarlo, pero lo cierto es que hemos tenido grandes fracasos.

El primero ha sido la nefasta temporada que ha tenido uno de los teatros más memorables de la ciudad Condal, el Romea, suyas son la mayoría de obras que si de buen principio parecían geniales, una vez puestas en marcha han sido demasiado decepcionantes. La que se lleva la palma, no sólo del Romea, sino de la temporada en general, es Mama Medea, con una Roser Camí como protagonista que dejó indiferentes a todos menos a los críticos, que la subieron a un inmerecido altar.

El éxito de público no implica generalmente que la obra sea magnífica. En este caso la obra es casi perfecta. Hablo de uno de los éxitos de la temporada en cuanto al aforo se refiere, La casa Bernarda Alba, en la Sala Pequeña del TNC, y el único pero de la obra se encuentra en su actriz principal, Núria Espert. Cuando escribí la crítica lo definí así "Bienvenidos a una casa de Bernarda Alba, sin Bernarda", no queda más que decir.

Otras de las grandes decepciones han sido, la vuelta de Sanchís Sinisterra en Vagas noticias sobre Klamm, otra dirección sin dirección de Magda Puyo, que tras la citada Mama Medea lo volvió a intentar sin mucho éxito con Antílops, el T-6 de Marta Buchaca en la Beckett, Plastilina, donde fallaba lo principal, el texto, y la última decepción la hemos tenido durante el Festival Grec con La Ilíada, si alguien la ha visto y ha entendido porqué o qué aporta de nuevo que me la explique.

Pero a parte de decepciones, ha habido alegrías, la más grande de todas, y que nos ha acompañado durante nueve meses con su trilogía es Pau Miró con Búfals, Lleons y Girafes. Para los fieles, nos ha tenido enganchados a ver como continua la historia que ha finalizado durante el Grec con Girafes y que si se la han perdido o quieren volver a verla estará a la Sala Beckett desde principios del mes de octubre. A pesar de su juventud, Pau Miró ha sabido crear un universo propio y unos fieles seguidores del mismo. Con una escritura ágil, con fuerza y directa Pau Miró se ha consolidado durante esta temporada como uno de los grandes a tener en cuenta.

Otra de las nuevas sorpresas ha sido la casi desconocida Eva Hibernia, que después de su paso la temporada anterior por la Sala Tallers con su T-6, Una mujer en transparencia, llegaba a la Sala Beckett con poca publicidad y una sorpendente La América de Edward Hopper bajo el brazo. Una obra de increíble liirismo donde realidad, ficción y sueños se dan la mano de una manera realmente mágica.

Pero sin duda las dos mejores obras de la temporada han sido Mort de Dama con una genial Mercè Arànega en uno de los papeles más díficiles y completos de su carrera y Mort d'un viatjant con una magnífica dirección de Mario Gas y con un magnífico y extraordinario Jordi Boixaderas.

En Catalunya tenemos la suerte de contar con un teatro público de consolidadas bases, buena muestra de ello son los espectáculos que nos ofrece el Teatre Nacional de Catalunya. Esta temporada nos ha presentado un gran texto de Bernard Shaw, La casa dels cors trencats, dirigido magistralmente por Josep Maria Mestres y protagonizado por una de las grandes actrices del país, Carme Elías, pero sin duda lo que más destacó de este espectáculo fue su escenografía, la de la primera parte, el interior de un magestuoso navío.

Antes de acabar con el balance, es necesario y casi obligatorio destacar las dos salas/teatros que mejor programación (global) han tenido durante esta temporada, el Teatre Lliure, que año tras año nos demuestra como es posible programar calidad, cantidad, y hacer que el público acuda a verlo; y la Sala Beckett, que se consolida como un espacio alternativo pero dentro de un circuito comercial, donde la calidad no está reñida ni con la innovación ni con la presentación de nuevos dramaturgos.

No ha sido una mala temporada, quizás no ha estado al nivel que se esperaba en un principio, pero dicen que de los errores se aprende y esperemos que los programadores en la próxima temporada nos lo demuestren.

BALANCE TEMPORADA 08/09

by on 20:42
Una vez finalizado el Festival Grec el pasado domingo, me voy a permitir la licencia de hacer balance de este año de intenso teatro. Una ser...


FICHA ARTÍSTICA
TEXTO: FRIEDRICH von SCHILLER
TRADUCCIÓN: ADAN KOVACSICS
DRAMATURGIA: MARC ROSICH y CALIXTO BIEITO
DIRECCIÓN: CALIXTO BIEITO
INTÉRPRETES: BEGOÑA ALBERDI, JORDI ANDUJAR, ÀNGELS BASSAS, RAFA CASTEJÓN, JOSEP FERRER, CARLOS HIPÓLITO, VIOLETA PÉREZ y MINGO RÀFOLS
PRODUCCIÓN: TEATRE ROMEA, XV INTERNATIONALEN SCHILLERTAGE, CENTRO DRAMÁTICO NACIONAL i GREC'09 FESTIVAL DE BARCELONA
TEATRE GREC


Después de dejarnos helados con una adaptación del clásico Tirant lo Blanc, la temporada pasada, Calixto Bieito ha llevado su último espectáculo al Teatro Grec de Barcelona con gran éxito. Don Carlos une una impresionante e impotente puesta escena, casi operística, a las que normalmente nos tiene acostumbrados Bieito con unas excelentes interpretaciones y una cuidada dirección.

La historia de una España podrida, donde el circo, la Iglesia y las tradiciones lo envuelve todo y a todo aquel que se salga de su papel establecido desde la cuna verá como su placentera vida se convertirá en la más horrible de sus pesadillas.

El fanatismo religioso, la sangre derramada de los muertos en un imperio donde no se pone el sol se une a la sangre de la fiesta nacional, el poder de un Rey que domina sobre su pueblo pero no sobre su corte, los cimientos de una sociedad a punto de derruirse por sí misma es el retrato de la leyenda negra de una España vista por los ojos de un alemán.

Felipe II, un intermitente Carlos Hipólito, nos recibe en su invernadero, donde cuida sus plantas y donde la vegetación crece gracias a los nutrientes de los cadáveres que se esconden enterrados. Pobre Don Carlos, un brillante Jordi Andújar, que enamorado de su madre, Isabel de Valois, Violeta Pérez, a la que le falta voz y fuerza en la mayoría de las escenas, acaba en un deliro absurdo por unas normas y leyes que coartan su libertad y la del resto de personajes. Don Carlos se tiene que enfrentar a las fuerzas humanas y espirituales y vivir en la jaula de su vida. Un gran princesa de Éboli, Àngels Bassas, que supera en fuerza y presencia escénica a casi todos sus compañeros y Mingo Ràfols como Gran Inquisidor, que vuelve a contar con la extraña magia que desprenden sus ojos para que la palabra de Dios se imponga en un mundo sin perdón.

Como viene siendo habitual en los montajes de Calixto Bieto, la música vuelve a ser imprescindible. En este caso Begoña Alberdi, la Duquesa de Alba, y Josep Ferrer, el Duque de Alba nos interpretan un réquiem por la muerte de una sociedad, de un tipo de pensamiento humanista que se enfrenta a un incierto claroscuro al constatar que se hallan en un mundo sin un futuro visible. Pasodobles y demás canciones y actos circenses nos mostraran a una España no tan lejana como debería que mezcla la fiesta y el sacrificio de la sangre en la plaza de toros.

El virtuosismo y la cuidada representación de Don Carlos ha sido el colofón final a un agridulce Grec'09, que prometía más de lo que ha acabado ofreciendo y que a pesar de las cifras, esperemos que el año que viene cumpla con las expectativas.

DON CARLOS

by on 20:12
FICHA ARTÍSTICA TEXTO: FRIEDRICH von SCHILLER TRADUCCIÓN: ADAN KOVACSICS DRAMATURGIA: MARC ROSICH y CALIXTO BIEITO DIRECCIÓN: C...


TEXT: Alessandro Baricco
TRADUCCIÓ: Anna Casassas
ADAPTACIÓ i DIRECCIÓ: Tom Bentley-Fisher
INTÈRPRETS: Mercè Anglès, Mercè Arànega, Anna Güell, Àngels Sánchez i Mar Ulldemolins
PRODUCCIÓ: Q-ARS Teatre, Centre D'Arts Escèniques de Terrassa, Centre D'Arts Escèniques de Reus i GREC'09 Festival de Barcelona
BIBLIOTECA DE CATALUNYA


A La Ilíada d'Homer el paper de les dones queden relegades a un segon pla i els homes acaparen tot el protagonisme. Totes són filles, mares, esposes o minyones. Són els homes qui lluiten durant deu anys per conquerir Troia. Per això, al 2005 Alessandro Baricco va fer la seva pròpia versió d'aquest clàssic, Homer, Ilíada on són els humans els responsables dels seus propis actes i no els déus.

Ara el director canadenc Tom Bentley-Fisher ens presenta aquest muntatge on els protagonistes no són violentes guerrers, ni reis, ni déus, són cinc dones que pertanyen a les dues bàndols de la guerra: esposes, mares i filles dels guerrers, velles i joves, totes volen resposta a aquest conflicte interminable i a totes les guerres del món.

Si pensem en els conflictes que assolen mig món, les dones són la part més perjudicada, des de que veuen als seus marits marxar a morir al front, i es queden soles amb les seves criatures, moltes vegades passen anys sense resposta i algunes no la trobem mai.

Mercè Anglès, Mercè Arànega, Anna Güell, Àngels Sànchez i Mar Ulldemolins són les tres heroïnes d'aquesta guerra, d'aquesta Illíada. Un muntatge ple de silencis, de mirades, de gestos, on la música emmudeix les parts fosques dels personatges. El dolor, la ràbia, la impaciència, els desitjos no complerts, la solitud, la desesperança, el temps tots i cadascú d'ells es donen cita en aquestes cinc dones.

Sense cap interpretació a destacar, totes cinc aporten o al menys o intenten la seva experiència damunt l'escenari, però el resultat no és l'esperat. El ritme de l'obra es fa lent, pesat, masses escenes curtes, els espectadors es queden a mitges a l'espera del punt i final. Un altre versió d'una adaptació d'un clàssic que serà millor oblidar.

LA ILLÍADA

by on 17:00
TEXT: Alessandro Baricco TRADUCCIÓ: Anna Casassas ADAPTACIÓ i DIRECCIÓ: Tom Bentley-Fisher INTÈRPRETS: Mercè Anglès, Mercè Arànega...


TEXTO: SÓFOCLES
TRADUCCIÓN: EDUARDO MENDOZA (del francés) y DANIEL LOAYZA (del griego)
DIRECCIÓN: GEORGES LAVAUDANT
INTÉRPRETES: EUSEBIO PONCELA, PEDRO CASABLANC, MIGUEL PALENZUELA, ROSA NOVELL, LUIS HOSTALOT, LAIA MARULL, NOELIA BENÍTEZ, FERNANDO SANSEGUNDO, CRÍSPULO CABEZAS
PRODUCCIÓN: TEATRO ESPAÑOL DE MADRID y GREC'09 FESTIVAL DE BARCELONA
TEATRE GREC


Edipo, una trilogía se nos ha anunciado como uno de los platos fuertes este año en Festival Grec. A partir de Edipo, Rey; Edipo a Colonos i Antígona de Sófocles, Georges Lavaudant construye su particular versión de Edipo. Con una atmósfera, demasiado contemporánea se nos presenta uno de los mayores dramas del teatro clásico.

Con un primera parte lograda y ágil, ayudada por pantallas que suben y bajan, con un Eusebio Poncela que atrae todas las miradas de los presentes, que conduce al espectador por todos los vericuetos que le ocurre a Edipo, sus gestos y su dicción, acompañan a un gran Edipo Poncela, mientras Yocasta, interpretada por una indiferente Rosa Novell, intenta sin mucho éxito, tranquilizar a un Edipo preocupado por las revelaciones de los oráculos. El resto del reparto queda eclipsado por el savoir faire de Poncela.

Tras el descanso nos espera un Edipo ya ciego y su hija Antígona que lucha contra las fuerzas por dar entierro a su hermano Polinices, al que su tirano tío Creonte se niega a dar sepultura. El texto se desacelera, los personajes se vuelven excesivamente parados y a pesar de la fuerza escénica de Pedro Casablanc como Creonte, éste no llega a hacernos olvidar el gran Edipo de Eusebio Poncela de la primera parte.

Esta segunda parte resulta excesivamente parada, quieta, sin sorpresas. Georges Lavaudant ha desprovisto su versión de lirismo y heroicidad, pero al mismo tiempo la ha dejado sin un ápice de emoción. Sus personajes no sienten ni padecen, da igual que les dejen ciegos, que les maten un hijo o un hermano. Y el público ante la no emoción se muestra indiferente.

Es surrealista pensar que en la época griega existiera el teléfono, o la televisión, elementos que sirven para complementar este último acto. Todavía existen los que creen que para acompañar una buena historia, de sobras conocida, no sólo por los seguidores de las artes escénicas, sino por el universo entero, en intentar poner palos a unas ruedas que no lo necesitaban.

EDIPO, UNA TRILOGÍA

by on 17:02
TEXTO: SÓFOCLES TRADUCCIÓN: EDUARDO MENDOZA (del francés) y DANIEL LOAYZA (del griego) DIRECCIÓN: GEORGES LAVAUDANT INTÉRPRETES: E...